Arqueología Puigcampanera: Anglada-Cerdà-Gallego

[makoki]

El miércoles me junté con Ximo y Sonia que iban al Puig. La idea era subir el Espolón Elegant junto con unas amiguicas vascuences. Les propuse ir por la vía paralela, la Anglada-Cerdà-Gallego, que no la habíamos hecho ninguno, y de paso ir con algo de herramienta y consumibles, por si se terciaba cambiar algo. Les pareció bien, así que para allá que fuimos.

El primer largo es muy cortito y fácil, así que seguí hasta la siguiente reunión, un cintajo rodeando una piedra (estilo eduars). Sale un largo chulo que para ser V+ hay que escalarlo. Hay dos clavos en el tramo más mantenido, el resto a cacharrear.

Sólo tengo cromos chulos de este largo, osea que van en tropel:

La parejica progresa adecuadamente:

Arqueología Puigcampanera: Anglada-Cerdà-Gallego

Arqueología Puigcampanera: Anglada-Cerdà-Gallego

Arqueología Puigcampanera: Anglada-Cerdà-Gallego

Arqueología Puigcampanera: Anglada-Cerdà-Gallego

Y monográfico de la rubia:

Arqueología Puigcampanera: Anglada-Cerdà-Gallego

Arqueología Puigcampanera: Anglada-Cerdà-Gallego

Arqueología Puigcampanera: Anglada-Cerdà-Gallego

Arqueología Puigcampanera: Anglada-Cerdà-Gallego

Arqueología Puigcampanera: Anglada-Cerdà-Gallego

Arqueología Puigcampanera: Anglada-Cerdà-Gallego

Luego siguió Ximo saltándose una reunión muy cercana a la primera nuestra (que reforzamos con un parabol), hasta un árbol donde se hace la segunda R (Ximo se fue un poco a la izquierda por unos bloques, pero luego vimos que no es por ahí), y el siguiente largo es evidente hasta la terraza donde puedes seguir por el espolón elegant o por rompededos.

Como el último largo de rompededos estaba con los spits originales, del año que atacaron, aprovechamos y lo reequipamos, y en el descuelgue añadimos un parabol (sólo había uno). Todos los paraboles (y chapas) inox salvo el último bicromatao (no me quedaban inox). Este largo lo he visto reseñado de 6a en algunos croquis, y de 6a+ en otros. Me quedo con la segunda opción.

Pues eso. La vía está chula y prácticamente limpia, y haciéndola como la hemos hecho nosotros, en tres largos (largos) la tienes hecha.

Cuelgo un croquis en imágenes. Por cierto, Josem, a ver cuando ordenáis los cromos de croquis, coño, que me tenéis la sección de imágenes hecha unos zorros, todo manga por hombro, todo mezclao, con lo bien que estarían los croquis en sus carpeticas y lo poco que cuesta tener todo ordenao y limpio, esto es un sinvivir, oiga 

Hala pues, besos y eso 

[josem]

Eso esta hecho. Si es que tenemos esto para restaurar...beto tiene una anécdota de ese diedro,  que la cuente jejeje.

Saludos.

[Navarro]

Heee!!
¡¡Nosotros hicimos el sábado la Anglada-Cerdà-Gallego y vimos los parabolts nuevecitos!!
Pero la primera reu la hicimos un poco más arriba de donde pusisteis el parabolt, que hay un clavo del año la picor y un par de cordinos en un puente de roca.
¡¡ Pero el parabolt por supuesto que lo chapé !! 

[beto]

Bueno.. la anécdota es que casi me dejo las piernas en esta vía!

Hace ya algunos años.. De cuando quedaba en el club los jueves para ver que se hacía y cuando eso de tener friends propios era, para mi, algo reservado a los muy máquinas.
Así, cual videoclub, se cogía prestado el juego de friends durante una semana, renovable, eso si...

Llegué al club y dije en voz alta... pues a mi me gustaría que alguien me enseñase a escalar vías desequipadas..
Uno de los del club me dijo.. pilla los empotradores y los friends que el domingo vamos al Puig Campana.

Me imaginaba una especie de clase teórica en el saco, antes de dormir o al menos a pie de vía... nada más lejos.
Llegamos a pie de vía y me dijo:  "  no querías meter cacharros?? Ale! tira!! "
Yo incrédulo exclamé: " ... osea... pero... a ver...."  y me metí.

A los pocos metros de comenzar, escalando con unos "magníficos" Boreal New Ballet de color azul (chiquito escombro, con todo respeto) empecé a meter estos inventos, dudando desde el principio de su efectividad o al menos de mi destreza a la hora de colocarlos.

Llegué a un punto en que no supe si darme el paso o protegerlo.. intenté escalarlo y me acojoné, así que retrocedí y
puse el más grande de los empotradores. Con el paso protegido seguí escalando hasta que la "super adherente" suela de mis
pies de gato me la jugo.. me di un saque de varios metros.
No supe que había pasado, hasta que me vi colgando de ese empotrador.. Sudoroso y de colo blanco me quedé sorprendido..
"joder! si que aguantan" le dije a mi compi que estaba más blanco que yo..
Me bajé al suelo.. estaba sangrando mi mano derecha. Mientras bajaba ví el caos de bloques que hay a pie de vía y fue
cuando realmente me entro un helor frío. Si no me hubiera aguantado el empotrador me hubiera reventado, al menos, las
dos piernas enteritas...
Se me quedo una buena cicatriz en la mano derecha que aún conservo.. con cariño.

[iglesiavieja]

Ale tira,  jeje q bueno, métodos de choque ,pero choque de los buenos.

[okapi]

Como va de anecdotas, cuento la mía.
Año 1979, jovenet, haciendo COU y de viaje de fin de curso a Paris. Todo el dinero que tenía ahorrado me lo dejé en una tienda que todavía me alucina "El vieux Campeur" o algo así, no sé francés. Para lo que teníamos aquí todo era novedad. Durante la hora y pico que pasé en la tienda babeé todo lo que pude y más. El dinero me dio para un caso galibier rojo, era mi gran ilusión, y dos empotradores. Uno simond de con la cuña de plástico y otro tipo bicoin del 6 ó 7.

Nada más llegar a Alicante había que estrenar el material y que mejor vía que el Espolón Payjú. Ibamos Pascual, que no imagino que habrá sido de su vida. Un tercero que no me acuerdo y en base de pared "El Bola" una institución del Centro Excursionista de Alicante que decía que cuando no era "redondo" había escalado mucho. Creo que había abierto "El Cabeça".
Desde abajo nos daba lecciones de como escalar. Llegamos a la diagonal y como no, me tocó a mi. Iba con bota rígida, pantalones militares de faena y un jersey rojo de los que vendían baratos en la tienda de la OJE de la calle Calderón de la Barca (los jóvenes de Alicante ni habrán oído). Empecé el largo con más miedo que espalda. Tras unos metros y antes de empezar la cicatriz de la diagonal puse el empotrador, por estrenarlo más que otra cosa. Seguí subiendo y el sabor acre del ¡miedo cada vez hacía mi boca más pastosa. Tras varios pasos agónicos vi una sabina o mata parecida y pensé ¡Mi salvación!
Sin empacho me lancé y la agarré con todo mi ímpetu, y la sabina cedió con todas sus ganas. Volé unos 12 metros. Pascual me paró a pelo, ni ocho, ni nada, a la espalda como los de entonces. Cuando recuperé la noción del tiempo y del espacio vi que colgaba del empotrador y que nada más había hasta una reunión con un único clavo. Mis pantalones, recién comprados en el rastro estaban ehechos jirones y toda mi pierna derecha estaba cubierta de sangre. Y yo más feliz que un tonto con una pelota. Me habia caído y no me había matado... La bajada fue mucho más terrible que la caída, pero eso es otra historia ...