Cuando en los años 80 paseabamos por las calles de Chamonix uno de nuestros entretenimientos favoritos, consistia en pasar el rato imnotizados delante de los escaparates de las inumerables tiendas de deportes, soñando con las ultimas novedades de material y flipando con los videos de los Patrik Edlinger y Berhault con sus cintas al pelo y sus flamantes gatos "Dolomite" escalando en las gargantas del rio Verdon.
En el año 87 tuve la suerte de poder recorrer algunas de aquellas vias durante 12 fantasticos días con mi buen amigo Jose Matas y para mi fue como para un musulman pereginar a la Meca, solo que en este caso los profetas que nos indicaban el camino a seguir fueron estos fenomenos de la vertical que junto con unos cuantos más revolucionaron este mundillo de la escalada.
D.E.P.